Con motivo del encendido de las luces de Navidad en Málaga de este fin de semana, en El Malaguita nos hemos propuesto compartir esta semana una receta típica de la Navidad. Y es que, estando ya saturados de anuncios de juguetes infantiles, con algunos colegios vendiendo mantecados para sufragar viajes escolares y con las típicas tiendas de productos artesanos en estas fechas, os dejamos la receta para que os animéis a hacerla en casa, continuando o creando tradiciones reposteras familiares: roscos de vino de Málaga.
Cuenta la leyenda de nuestros pueblos que hace muchos años, el mozo colgaba en la puerta de su amada una retama fresca en señal de amor sincero y respeto hacia su familia. Si esta declaración amorosa era correspondida, para sellar la aceptación de la relación por parte de la familia se preparaban unos roscos que se comían en la cita que se organizaba para conmemorar la primera entrada del joven en casa de su futura esposa. Sin embargo, si la relación no era aprobada, no se celebraba ningún acto, dando lugar al famoso dicho de “no comerse un rosco”.
Aunque se trata de una receta muy extendida por toda Andalucía, en nuestra provincia está especialmente extendida en la Axarquía y, por supuesto, en los conventos de nuestra provincia.
INGREDIENTES (4 personas)
- 1 kg. de harina de repostería
- 1/4 litro de vino dulce de Málaga
- 1 copita de anís dulce
- 1/4 litro de aceite de oliva virgen extra
- 250 gr. de azúcar
- 250 gr. de azúcar glass
- 150 gramos de almendras
- 1 sobre de levadura química
- una pizca de canela en polvo
- 1 cucharadita de matalaúva (anís en grano)
- piel de limón
PREPARACIÓN
- Antes de preparar el postre, pelamos las almendras dejándolas en agua durante unas horas y dándoles un hervor. Una vez hecho reservamos.
- Calentamos el aceite de oliva en una sartén y freímos la matalaúva y la piel del limón durante pocos segundos. A continuación, colamos el aceite y lo vertemos en un recipiente amplio, añadiéndole también el vino dulce.
- Majamos las almendras en un mortero y las echamos al recipiente. Añadimos también la canela molida, la levadura y la harina.
- Mezclamos todos los ingredientes y amasamos hasta que la masa quede homogénea y se separe de las paredes del bol, añadiéndole harina si lo consideramos necesario. Tapamos con papel film transparente y la dejamos reposar de 1 a 2 horas.
- Una vez reposada, estiramos la masa con un rodillo para que tenga 1,5cm. aproximadamente. Cortamos los roscos con la ayuda de un cortador redondo de donuts o los hacemos de forma artesanal.
- Los colocamos en una bandeja de horno y horneamos a 200º durante unos 15 minutos o hasta que estén bien tostados.
- Sacamos del horno y dejamos enfriar. Cuando estén templados los espolvoreamos con el azúcar glass dos o tres veces (al gusto del comensal) para que éste se adhiera bien.
- IDEA: Una idea para que el azúcar glass se quede bien adherido es preparar un pequeño almíbar con anís y agua y aplicarlo a los roscos antes de espolvorear el azúcar.
- SUGERENCIA: Esta receta es tan deliciosa que los roscos se pueden disfrutar tanto con una taza de chocolate caliente como con una copita de vino dulce malagueño al lado.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir